La
Alimentación Durante el Embarazo
Durante
el embarazo se producen una serie de cambios en el organismo de la gestante
diabética, el desarrollo del feto hace que el organismo materno vaya a necesitar una
cantidad extra de calorías, porteínas, calcio y otras sustancias
nutritivas. Además
no hay que olvidar que los cambios hormonales propios de la gestación,
después del primer trimestre, aumentan las necesidades de insulina.
Todos
los cambios en la alimentación, tanto en cantidades como en tipos
de alimentos, los horarios,... deberán hacerse teniendo en cuenta
no perjudicar el buen control de las glucemias, el tratamiento insulínico
y el aumento adecuado de peso.
Aumento
de Peso
En
cuanto al aumento de peso, en términos generales este debe ser
entre 9 y 12.5 kg al final del embarazo.
Aumentos
menores de peso no son aconsejables (excepto en caso de obesidad previa
al embarazo).
Aumentos
superiores a 14 kg pueden favoreces la aparición de algunas complicaciones.
Calorías
Totales
Las
proteínas son indispensables para la formación y crecimiento
de los distintos órganos del futuro hijo.
Siguiendo
las recomendaciones del grupo de expertos de EE. UU. son aconsejables
aumentos entre 20 y 30 gramos/día de proteínas respecto
a la dieta que se venía siguiendo anteriormente.
20
gramos de proteínas se consiguen con:
- 100 gr de carne.
- 120 gr de pescado.
- 2 vasos (400
cc) de leche.
- 70 gr de queso.
- Una tortilla
de 2 huevos con 50 gr de pan.
Calcio
El
calcio es un elemento necesario para la formación y el mantenimiento
de los huesos.
Durante
el embarazo se necesita un aporte extra bastante importante, sobre todo
desde el cuarto mes de gestación hasta el final de la misma.
Si
normalmente se necesitan unos 700 miligramos de calcio al día,
durante el embarazo son necesarios 300 miligramos más.
Las
consecuencias de ingestas insuficientes de calcio son la descalcificación
de huesos y dientes de la futura mamá.
En
la práctica lo más sencillo es recomendar el consumo de
leche, yogur y queso, siempre como parte del conjunto de la alimentación
diaria y con un reparto adecuado de los hidratos de carbono a lo largo
del día.
Hierro
El
hierro es un elemento mineral imprescindible para la formación
de los glóbulos rojos o hematíes.
Durante
el embarazo se recomienda tomar unos 30 miligramos al día.
Los
alimentos más ricos en hierro son:
- Hígado
(de ternera o cordero)
- Carnes rojas
- lentejas
- otras legumbres
y en menor cantidad
- Espinacas
- Yema de Huevo
- Carnes Blancas
(pollo y ave en general)
La
Sal
Deben
consumirse con moderación alimentos salados o el uso de sal en
la mesa, pero no está prohibida.
Solo
en el caso de que exista un problema de salud, como la Hipertensión
Arterial (HTA), entonces se seguirá la prescripción médica.
Las
Vitaminas
Con
una alimentación equilibrada y variada que contenga frutas, verduras,
carnes, pescados, leche,... muy probablemente se cubren las necesidades
Vitamínicas en el embarazo.
Los
Horarios
Deberá
programarse las comidas según la actividad y el tratamiento insulínico.
Una
sensación intensa de hambre puede presentarse dos o tres horas
después de la última comida. Esto es normal.
Se
aconseja comer seis veces al día evitando comidas copiosas:
- Desayuno
- Media Mañana
- Comida
- Merienda
- Cena
- Resoplón
o complemento nocturno
Del total de los hidratos
de carbono que se deban ingerir en un día, la reparación
en cada comida será de la siguiente forma:
Desayuno |
20% |
Media
Mañana |
5-10% |
Comida |
30% |
Merienda |
5-10% |
Cena |
25-30% |
Resoplón
o complemento nocturno |
5-10% |
Otros
Consejos
Para
evitar o tratar el Estreñimiento,
debe tomar cantidades generosas de alimentos con fibra vegetal, principalmente
verduras y ensaladas.
Para
disminuir las naúseas matinales, estando en ayunas, recostada en
la cama, unos minutos antes de levantarse por la mañana, tomar
un par de galletas saladas o pequeñas tostadas