1.
Tratamiento Farmacológico
Desde
el punto de vista histórico, hasta la década de los noventa
únicamente se utilizaban fenobarbital, fenitoína, carbamazepina,
primidona y ácido vaíproico. Fue hacía 1993 cuando
surgieron los nuevos FAE: felbamato, gabapentina, lamotrigína,
topíramato, tiagabina y vígabatrina.
Actualmente
se encuentran en desarrollo otros anticonvulsivantes que actúan
sobre la transmisión del GABA como son: ganaxolona, retigabína
y pregabalina. Como puede apreciarse, hay muchos antiepilépticos,
lo que indica que ninguno sobresale claramente.
El
tratamiento preferente consiste en !a monoterapia con un fármaco
antiepiléptico ya que provoca menos efectos secundarios que la
politerapia posiblemente con la misma eficacia.
Estos
fármacos actúan a los siguientes niveles:
A.
Inhibidores de la Excitación
Los
Bloqueantes de los Canales de Sodio
1.-
Carbamazepina
Se considera de primera elección en epilepsias parciales
y generalizadas tónico-clónicas. Sus efectos adversos
más característicos son vértigos y somnolencia.
Se trata de un potente inductor enzimático, por lo que pueden
interaccionar con una gran número de medicamentos, entre los
cuales, por ejemplo, están los anticonceptivos orales.
2.-
Fenitoína
Su eficacia
es semejante a la de la carbamazepina, pero el margen terapéutico
es muy estrecho, pudiéndose producir intoxicación si no
se ajusta correctamente la dosis.
3.-
Ácido valproico
Es efectivo
en convulsiones generalizadas tónico-clónicas y en parciales,
pero es el tratamiento de elección en ausencias y en convulsiones
mioclónicas.
Sus efectos adversos más frecuentes son sedación, aumento
de peso y temor. Una de sus ventajas es que no produce inducción
enzimática.
4.-
Lamotrigina
Es eficaz
en crisis parciales con o sin generalización secundaria a tónico
clónicas y en crisis primarias generalizadas tónico-clónicas.
Además es útil en el síndrome de Lennox-Gastaut.
Puede producir reacciones alérgicas cutáneas graves (rush
cutáneo) aunque con muy poca frecuencia. Una ventaja es que parece
producir menor grado de sedación y trastornos cognitivos que
otras alternativas terapéuticas.
5.-
Topiramato
Actúa
principalmente a tres niveles: modulando el funcionamiento de los canales
de sodio dependientes del voltaje, aumentando la respuesta al GABA por
los receptores GABA A y reduciendo la acción neuroexcitadora
del ácido glutámico sobre los receptores AMPA/kainato.
Es útil en cuadros epilépticos refractarios a tratamientos
convencionales, así como en ciertas patologías epilépticas
de difícil tratamiento, como el síndrome de Lennox-Gastaut.
El inconveniente es la relativamente alta incidencia de efectos adversos
cognitivos y psicológicos.
6.-
Felbamato
Se cree
que actúa modulando canales de sodio y directamente sobre receptores
de tipo NMDA. Está indicado como tratamiento coadyuvante en los
pacientes con síndrome de Lennox-Gastaut de cuatro o más
años de edad y que sean resistentes a los otros antiepilépticos
disponibles. El riesgo radica en el desarrollo de anemia aplásica
y hepatotoxicidad grave.
Los
Bloqueantes de los Canales de Calcio
La
etosuximida está considerada
uno de los fármacos de elección en ataques de ausencia.
Sus efectos adversos más frecuentes son vómitos, náuseas,
calambres abdominales y en menor grado cefalea, mareos y sedación.