Estos
accidentes son poco frecuentes en nuestros días, pero a menudo provocan
la muerte.
El niño puede tocar un cable en mal estado, las clavijas de un enchufe
poco introducido en la conexión, la parte metálica de un portalámparas
o la toma hembra de un cable de prolongación conectado a la red o bien
introducir un objeto metálico en la toma de corriente. También puede haber
en el hogar aparatos eléctricos con malas condiciones de aislamiento.
Actuación
1.
No tocar al niño.
2.
Desconectar la corriente y separar al niño de la fuente eléctrica
con un objeto seco no conductor. Avisar y pedir ayuda sanitaria.
Comprobar la respiración y el pulso y, si es necesario, iniciar la reanimación
cardiopulmonar.
Prevención
1.
Mantener una instalación eléctrica en buen estado.
2.
Colocar un interruptor diferencial en la entrada de la toma
eléctrica de la casa.
3.
Poner enchufes de seguridad o clavijas falsas.
4.
Revisar periódicamente los aparatos eléctricos y los cables.
5.
No tocar electrodomésticos ni enchufes con las manos o los
pies húmedos.
6.
Suprimir los cables de prolongación, evitar los empalmes y
sustituir los cables deteriorados o defectuosos.
Esconder los objetos metálicos punzantes (tijeras, cuchillos, destornilladores,
horquillas, etc) que los niños puedan introducir en los enchufes.